Los aspectos más molestos de Tauro

Los Taurinos son personas interesantes y sin dudas tienen mucho que ofrecer en una relación de pareja, pero también tienen su costado molesto, con el que no siempre es sencillo lidiar. Si estás decidido a conquistar el corazón de un toro y quieres que sea tuyo para siempre, aquí vamos con datos que te harán mucha falta.

Lo que no puedes ignorar si quieres un taurino en tu vida

Los taurinos rara vez actúan sin pensar y meditar largamente los posibles alcances de sus actos. A diferencia de otros signos del Zodíaco (leo, sagitario), no se mueven por mero impulso, lo cual les evita dolores de cabeza innecesario.  Son pacientes y esmerados. Hasta aquí todo muy bien, pero vamos a adentrarnos en el lado más irritante de los taurinos.

Siempre querrán hacer las cosas “a su manera”: Si bien ser organizado y metódico no está mal, a Tauro lo lleva al extremo de que mover un objeto decorativo de lugar sea un problema. Les cuesta horrores salirse de su estructura mental y de su rutina. Los desequilibra.

Tener un esquema en la vida los ayuda en el plano laboral, ya que les permite llevar a cabo sus propósitos al margen de las dificultades que se puedan presentar. Pero en el plano amoroso no todo es tan lineal, blanco o negro, aquí y así.

Una relación con Tauro puede volverse monótona porque les cuesta dar el sí ante propuestas de nuevas cosas. Les costará entender los cambios de humor o de rumbo en una pareja y pueden tornarse distantes y malinterpretar situaciones que para otra persona son mucho más simples.

Son personas austeras, que no gustan de despilfarrar en grandes lujos ni en objetos suntuosos. La simplicidad y el ahorro son lo de ellos, y probablemente no sufran grandes penurias económicas gracias a su mesura. La parte negativa es que les cuesta darse los gustos sin culpa, y que muchas veces este exceso de planificación del más mínimo centavo los llevará a privarse de placeres para ellos y sus parejas.

Son sumamente celosos y posesivos, y no aceptan que su pareja tenga demasiada vida individual. Cualquier situación equívoca por inocente que sea puede hacerlos sentir sumamente inseguros de sus relaciones y lo peor es que no siempre lo expresarán. Puede que se alejen sin motivo y el otro jamás comprenda qué fue lo que los enojó.

Tauro necesita rodearse de personas que sean capaces de mostrarle ese otro lado de la vida que a ellos tanto les cuesta disfrutar: La improvisación, el placer de mimarse y salirse del programa. Serán mucho más plenos y felices en la medida que comprendan que no todo está escrito y que la vida es ensayo y error y que si se equivocan, o los demás lo hacen, siempre se puede subsanar. Son leales, honestos y muy entregados en sus relaciones, pero deben aprender a relajarse y permitirse el error, el momento a momento y la posibilidad de aceptar lo bueno y lo malo de los demás y de ellos mismos.

 

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